lunes, 1 de julio de 2013

CUEVA DEL COBRE, PEÑA SESTIL (2065) Y LOS ANTIGUOS MOJONES

Primer día espléndido en la montaña palentina de este 2013. Mi objetivo, la Cueva del Cobre y algo más que me vaya al paso en su zona. Desde las ruinas del Refugio de Golobar te sitúas en un "salto" en el collado de 2000 metros y en un poco más en la muga de Palencia y Cantabria, el Peña Sestil (2065), desde donde el Valdecebollas (2143)  me llama.
Per Bat en Peña Sestil (2065)
Pero hoy no acepto su invitación.   Al poco de salir a las 9 h. alcanzo a Puertochico, que con su perro  pastor vasco Urtzi viene de nuevo desde su Santander natal a recorrer los viejos mojones, porque le faltan algunos de localizar y retratar para sus estudios. 62 años de mar, montaña y trabajo, interesante personaje, de los que yo trato de localizar para aprender en mis caminos montañeros y peregrinos.  

Antiguas majadas de pastoreo y los siempre impresionantes Picos de Europa, aún bien nevados.
Le acompaño, charlando y aprendiendo, mientras serpenteamos la frontera buscando las cruces de los antiguos mojones. Aquí mismo hace varios años coincidí con la Fiesta de la Mojonera que cada nueve años celebran en armonía los habitantes hermanados de los municipios palentinos de Los Redondos y  los de Brañosera.

Así se ve la oquedad de la boca de la cueva al desceder de Peña Sestil

Comparto  charla con dos "paisanos" de Puertochico, que entrenan para el Millatón de Hernani (168 kms. corriendo)
Una cruz, de lados iguales y cuatro puntos, tallados en la roca, mojones muy centenarios

Llegamos tras algún despiste por las "escobas" a la Cueva del Cobre, el lugar oficial  del nacimiento del río Pisuerga, donde un cartel "oficial" dice varias cosas y entre ellas que nace por debajo de tierra unos 1.500 m. más arriba. Su entrada y primer vestíbulo me parecen impresionantes de tamaño, por lo que la hipórtesis de la habitabilidad en el pasado sí me cuadra.
  



Llegan después una excursión de 20 chavales doceañeros de Legazki (Gipuzkoa) con algunos de sus padres. Qué bueno que les traigan cuatro días a ver estas maravillas naturales aún poco contaminadas ¡Zorionak!




 Aquí me despido de Victor, que me sorprenderá de nuevo a mediodía del día siguiente, con la localización del  e-mail de mi hijo Zigor (que desde luego no se lo dí) y el envío de las fotos en que aparecía yo. ¡Un gran tío!



Y voy con la segunda parte de mi excursión montañera, la que ya disfruté sólo.  Subí de los 1500 m. aproximadamente de la Cueva por el inmenso circo de Valdecebollas, haciendo un gran rodeo por la izquierda, deleitándome con el suelo y el paisaje, con las fotos, intentando trasladarme con el pensamiento para "ver" a los pastores de antaño, a los habitadores del circo y la zona de mucho más antaño.
 

Desde los 2065 metros del Peña Sestil, donde primero busco sin éxito el mojón de la cruz y saludo a los veteranos/as  bizaitarras que pasan en una ruta rompepiernas hasta el Valdecebollas (mañana siguen para Picos, según me dirá el conductor del autobús que les espera en el aparcamento de Golobar), disfruto otro buen rato de las vistas inmensas y del extraordinario sol y clima.

Rápido el descenso casi en picado al "refugio". Dos bandas de caballos y vacas me atraen como imanes a detenerme y retratarlas.  A las 15 h. en punto, a veces hasta soy puntual, me siento a la mesa a comer con mi familia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario