lunes, 17 de febrero de 2014

OLABEZAR: LA ALDEA Y EL CAMPO DE ZARAOBE

Por carretera, como hoy  parece que sólo se puede entrar, subiendo desde Bilbao ya pisas su suelo en Markijana, en uno de los puntos más bajos de Aiala. Si lo haces desde Amurrio hacia Atziniega, en el alto de la Mesa te encuentras con el lugar más histórico-político de nuestra Tierra. El crucero de Los Olmos es el vértice SO de este cuadrilátero irregular de 3,23 km2 de superficie y 237 m. de altitud en su iglesia.  En la punta del Babio (583), lo más al sur,  y junto al caserío Saerín, saliendo de Amurrio hacia el Cantábrico, están los otros dos vértices o esquinas de su suelo.
Yo entro por Los Olmos, donde esta casa de pisos que he conocido desde mi niñez me sigue sorprendiendo que fuera hecha, o más bien reconstruída y aumentada,  en zona tan aislada y rural
El río Izoria es la muga con el Polígono Industrial de Murga, algo que ha cambiado bestialmente la naturaleza de esta zona en las últimas décadas.
Una muestra del avance en espera del Polígono, que invadirá también parte de nuestra aldea de hoy y que de momento tiene en la desidia al antaño fértil barrio de Arza
La recepción madrugadora ha sido mala. No he acertado al informarle a uno de los indígenas que iba a hacer un reportaje de su pueblo para publicarlo en internet. Increíble pero cierta la agresividad irracional de dos personas aparentemente normales, tratando de echarme del pueblo con amenazas penalizantes, a los que he preferido considerar la excepción y enfermos. Después, Kepa y Aitor, dos hermanos de 4 y 9 años me siguen en su bici en parte de mi recorrido a pie y nos hacemos amigos. Alegre y cantador el pequeño, pescador y montañero el mayor, me hacen un poco de cicerones. Esto es la cruz y la cara que vivo en la primera parte de una mañana fresca primero y soledada después... y que tendrá su "premio" a la cultura y a la constancia al final de la misma.
En el pórtico de la iglesia aún está la mesa de piedra en que se hacían las juntas locales.

Esta aldea parece hecha a cachos entre carreteras y caminos, montañas, laderas y río. Sus praderas parecen fértiles, aunque hoy ya solo veo pastar unas cuatrocientas ovejas y me dicen que hay seis ganaderos. De sus datos de una guía de febrero de 2012 saco que tiene 65 habitantes. Ya en la Edad Media la atravesaba  casi por el centro el Camino Real a Orduña, donde los Murga edificaron su Palacio Torre desde donde  ejercieron  su vasto poder.
No hay casco urbano ni núcleo o barrio grande. Quizás esta vista de la parte alta de Mugaburugotxi, entre la Casa Concejo y la Iglesia, reflejen algo su estética actual.
Hacia 1960 se construyó para Escuela este sólido y moderno edificio, que al menos en Ayala sorprendió. Pronto llegó la Concentración Escolar, lo que provocó el fin rápido de su destino. Hoy es la Casa Concejo y parece extraordinariamente cuidada a la vez que bien situada.
Ya no se reune el pueblo en el pórtico de la iglesia, como allá por 1800 y sus siglos cercanos. Tiene una extraordinaria Casa Concejo. Perteneció desde la Edad Media a la Segunda Cuadrilla, llamada de Amurrio, en el orden de voto en las Juntas Generales de Zaraobe. Con ésta, que es ahora Villa y Municipio desde 1842, y Luyando y Murga como concejos compañeros cuando la Tierra de Ayala tenía muchos más Fueros y 36 pueblos. 
Desde la carretera de Murga a Amurrio, en el centro geográfico del pueblo,  dejo constancia del estado de estos cinco edificios, de los que sólo uno parece actualizado y en uso.
No debo ningunear en mi visita  a esta aldea,  al Campo de Zaraobe, ubicado en su suelo. Aquí se reunían  hace siglos los habitantes del Valle de Ayala en asambleas de administración política. Se encuentra a poco más de un kilómetro de Amurrio y tres de Respaldiza, por la ahora A624 que conduce a Artziniega, en el punto llamado Alto de la Mesa. Es un recinto cerrado por una pared almenada que guarda en su interior una tosca mesa de piedra con dos bancos corridos. Las Juntas Generales del Campo de Zaraobe tenían una cuadruple misión: legislativa, electiva, gubernativa y judicial.
Campo de Zaraobe
Campo de Zaraobe. La "historia" está en la mesa y bancos de piedra. El resto es un "adorno" o protección muy posterior.


Y San Babilás. No es fácil para el pueblo normal saber qué hace aquí una ermita dedicada a San Babilás, un obispo y mártir, según el santoral de la Iglesia Católica, que ejerció en Antioquía el año 240. No seré yo quien lo cuente aquí, que doctores tiene la historia para ello. Sólo mi historia. Y es que de jóvenes veníamos andando de Amurrio a la romería del 24 de enero, que entonces era grande, tanto como el frío que hacía. Y que hoy la he visitado de nuevo y pasado tres veces por delante, ya más de cuarenta y cinco años después.
La ermita de San Nicolás está en el Camino Real y rodeado de robles.
Y el anteúltimo párrafo es para la naturaleza. En Mugaburu hay tres robles de más de doscientos años. Y los txikis me dicen que hay más viejos.  ¡A ver si se conservan muchos más y mucho más tiempo!
Los robles más que bicentenarios de Mugaburu.

Y al final, el premio. Tras aparcar mi veterano turismo en un camino público y muy cercano a un puente medieval por el que sólo se pasa a pie o en caballo, un trabajador del campo -el único que veré en ello en todo el día-  viene corriendo  a atenderme, con las tijeras de podar en la mano.  Es foráneo y de mi época.  Su empatía, cultura, estudios y mundología me emocionan. Qué difícil es encontrarme con esta categoría de gente, con la que, en apretada charla por su inmediato compromiso, coincidimos algo en conocimientos, ideas, personas comunes tratadas, actitudes y aptitudes. Pero estoy en suelo de otro concejo, por lo que, contertulio casual Fede, escribiré de vuestras propiedades y algo más, cuando  suba al ciberespacio por vía de este blog la crónica de "tu pueblo adoptivo".

2 comentarios:

  1. Como en los anteriores artículos sobre los pueblos de Ayala, éste no podía quedarse atrás. Te salen bordadas las pequeñas historias y la Historia que de los mismos relatas.
    Dice un proverbio que lo cortés no quita lo valiente, por lo que lo siguiente sólo quiere expresar mi aprecio a lo que escribes, pero con las sugerencias que te explico. Así que ahí van: Habría que cuidar el uso de algunas palabras y formas escritas. Desecha "Aiala" que no se corresponde gráficamente. No olvides que "somos de..." o "vivimos en..." la Tierra de Ayala (Aiara Herri). Desecha "valle", máxime si en lo que cuentas haces uso de la Historia.
    Por otro lado, el título de "villa" (honorífica) de Amurrio es de 1919, para que no haya equívocos.
    Igual se te ha olvidado "etiquetar" Olabezar.
    Por lo demás a seguir así, que tiene un gran mérito la labor que has emprendido de contar el presente (y el pasado) de los distintos pueblos de Ayala-Aiara.
    ¡¡¡Viva y Viva Ayala/Aiara y sus Fueros!!!
    Un fraternal saludo

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  2. Ondo! Subjetivo en los primero (halago), pero milla esker. Objetivo, histórica y lingüisticamente, en lo segundo (crítica), pero eskerrik asko.

    Me considero más contador de "historias" para el pueblo llano, que historiador para el docto. Lo que se dice "en plan informal". Por ello me permito descender a veces al lenguaje de la calle e intencionadamente alterno, varío u omito nombres y/o sólo omito fechas, invento o cruzo palabras para crear estilo propio. El idioma perfecto, hablado o escrito, es la utopía y poco práctico. Apuesto más por la creatividad y lo "informal", hasta dentro de la culturización, porque con ello espero ser menos "pesado" para mis lectores.

    Aurrera beti, Ayala, Aiara, Aiala...!

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